Black & Brown: la sal sobre la mesa

Una carta equilibrada y un servicio cordial respaldan la oferta culinaria del nuevo espacio. Pequeño y tranquilo, un sitio con encanto

Decir que la apertura del Coffee Lounge  Black & Brown es una más de la serie de emprendimientos gastronómicos de los últimos meses en La Paz sería contar una historia sin sabor: ni el local es un sitio cualquiera, así como tampoco lo son sus propietarios.

Con una propuesta conceptual de gran personalidad y una atractiva oferta al paladar, el nuevo espacio instalado en el barrio de San Miguel de la zona Sur (Claudio Aliaga y René Moreno, 1159. Telf. 2 79 42 13) puede jactarse de haber ingresado con el pie derecho y con los mejores augurios en el hoy competitivo mundillo paceño de bares y cafés.

El carácter del lugar está definido por su acogedora e inspirada decoración matizada con bambús y textiles andinos, la distribución en pequeños ambientes no aislados, su iluminación y su agradable temperatura interna    –incluida la de su mínima terraza–. Ya sobre la mesa, un proporcionado menú incluye desayunos, entremeses de mediodía, y aperitivos y picadas para el final del día. Pero eso no es todo, falta la sal de la historia.

Los visionarios de Black & Brown son los miembros de la familia Lora, hoteleros potosinos que recorren el camino de las inversiones turísticas desde el 2007 con algunos emprendimientos catalogados como fuera de serie. Su mayor palma: el hotel de sal Luna Salada ubicado en el  Salar de Uyuni.

Tras el gran éxito obtenido por establecimiento hotelero, la familia inauguró en marzo de este año su nuevo proyecto en La Paz y, de ese modo, dio un  pequeño giro a sus inversiones. Hablamos con Rodrigo Lora (29), gerente comercial del grupo.

Con Black & Brown, la familia Lora incursiona en el rubro gastronómico, por lo menos en La Paz, ¿por qué pasar de la hotelería a la gastronomía? o ¿por qué incursionar en la gastronomía?

Darío Lora (DL): Nos encontramos en el rubro gastronómico desde hace 7 años con el Restaurante Tunupa del hotel Luna Salada de Uyuni. Ese es un lugar donde se puede degustar comida fusión andina. Incursionamos en el sector gastronómico con el objetivo de poder ofrecer un servicio completo a nuestros clientes. En el hotel Luna Salada nos esforzamos por generar una fuerte vivencia de la identidad cultural local a nuestros visitantes. En ese sentido, pensamos que la comida es un aspecto muy importante dentro de la generación de la experiencia mágica andina Uyuni. Con este segundo emprendimiento –el Black & Brown– decidimos apostar a la gastronomía para compartir con el público una variedad de productos y sabores interesantes. Quisimos armar un coffee lounge diferente, desde los productos hasta las instalaciones, un espacio donde nuestros clientes puedan sentirse cómodos en un lugar extravagante, deleitando diferentes combinaciones de sabores que se caracterizan por su alta calidad.

Nos enteramos que estuvo visitando Alemania en los últimos meses. Cuéntenos sobre el propósito de esa visita….

DL: Estuve en la ITB Berlín, una feria líder de la industria turística mundial, representando a Bolivia y al Hotel Luna Salada, junto al Viceministerio de Turismo y otras empresas. El motivo de esta visita fue básicamente la apertura del mercado turístico internacional para Bolivia. Fue un orgullo poder representar a nuestro país a nivel internacional exponiendo su riqueza cultural y biodiversidad.

¿Cómo nació la idea del proyecto Black & Brown? o ¿cómo nacen las ideas de negocios en su familia?

DL: La idea nació por el gusto al café y sus variedades. Las ideas de negocios nacen de la coyuntura, del contexto y evolución del mercado.

Después de asombrarnos con un sueño hotelero creado en base a bloques de sal queda ahora probar los sabores de Black & Brown. Mientras tanto, y como para abrir el apetito, cabe preguntarse: ¿cuál será la próxima aventura de estos recreadores potosinos de la sal?

TT-H/ Artículo disponible en alemán.